Antes de navidades fuimos a casa de unos amigos, G y J y G nos dijo ‘J me ha abandonado por un saquito’, dicho así sonaba raro, y más cuando nos trajo el “cuerpo del delito”, un saquito de tela como de unos 40 por 10 cm relleno de semillas.
La cosa se puso interesante cuando metieron el saquito en el microondas 1 minuto a calentar y me lo dieron para que me lo pusiera en el cuello…genial, es como una bolsa de agua o mantita eléctrica pero que no tienes que enchufar, guarda muchísimo el calor y al ser semillas lo que hay dentro es mucho mas adaptable, el problema era que se lo habían regalado y no sabían donde lo vendían.
Unos días después, paseando por uno de los múltiples mercadillos que pusieron por Madrid en Navidades vi…saquitos!!! Así que me compré 1, y debo decir que han sido unos 10 euros muy bien aprovechados, porque, el cuello vale, pero el saquito en la zona lumbar después de todo el día en las sillas de la oficina, que estarán homologadas, pero son una tortura, es una maravilla, y cuando vas a empezar a estar mala y te duele la tripa, los riñones y todo lo demás, meterte el saquito cerca de la tripa, es una delicia.
En fin, que yo también estoy pensando dejar a la parte contratante por mi saquito…de momento le salva esa frase de por las noches “te meto el saquito en el microondas?”…
jueves, 22 de enero de 2009
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... el mejor amigo de la mujer friolera...
ResponderEliminarOhhh!!!!! yo quiero dos!!! uno para mi y otro para mamí jajaja. Nena cuando vayas otra vez avisame y si eso te los pido vale??
ResponderEliminarBesitoss !!!